De Pablo Ramírez Puga

Parafraseando un poco con lo que hacen y dicen los funcionarios del actual sistema político nacional para justificar sus acciones y darles legalidad pública, hoy los oaxaqueños ya contamos con nuestra “verdad histórica” en un caso que siempre estará envuelto en la polémica y, por supuesto, en la ilegalidad ya que para construir una candidatura a gobernador se tuvieron que utilizar argucias legaloides para darle legitimidad y validez.

Y para ello se utilizó la flacidez instrumental del pleno del Tribunal Estatal Electoral de Oaxaca, quien, de última hora, rechazó por mayoría la impugnación de la coalición PAN-PRD contra la candidatura de Alejandro Murat Hinojosa, candidato a Gobernador por el PRI-PVEM-Nueva Alianza, y declaró su registro “válido y legítimo”, haciendo igualmente válida una carta de residencia amañada e instrumentada por el H. Ayuntamiento de la ciudad de Oaxaca de Juárez.

La resolución se veía venir porque nuestras leyes están hechas para beneficio siempre de la clase política y de quienes tienen la facilidad de aprovecharse de los vericuetos legales para acomodarla a sus intereses.

De esa forma “candidato habemus”, le guste a quien le guste, y a quien no, también.

Ahora sólo queda la disyuntiva: ¿el electorado oaxaqueño le dará la oportunidad a “los Murat” de reivindicar el apellido y de paso ganarle por segunda vez al “delfín” del Diodorismo?, ¿o será la debacle de un dinosaurio priista más?

Es evidente que el proceso electoral en que se encuentra inmerso el Estado de Oaxaca no deja de ser especial y manido, porque la legitimidad de todos los candidatos en contienda no está basada únicamente en el papeleo burocrático electoral, sino en la trayectoria política de cada uno de los candidatos, la cual adolece de claridad política.

Oaxaca está viviendo una etapa de degradación en el ejercicio de la política, en donde quienes quieren gobernarla no tienen el sustento de la confianza ni la credibilidad en su trayectoria que permita aspirar a los oaxaqueños a tener un buen gobierno.

Esa es nuestra otra “verdad histórica”, la que nos obliga hoy en día a ser desconfiados y a estar pendientes del accionar y los resultados de quien obtenga la victoria electoral el próximo 5 de junio…

Oaxaca de Juárez, Oaxaca; martes 26 de abril/2016.

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