Por Alejandro Alemán Treviño
Como te ves, me vi, como me ves quien sabe si llegues.
Los sismos son arritmias cardiacas de la contaminada tierra
Estoy en contra del aborto, excepto los retroactivos de los políticos.
Estaba redactando mi leído y no comprendido mininoticiero, sobre la visita del señor Jorge Mario Bergoglio, el Papa Francisco, cuando me enteré de la masacre acaecida en el penal de Topo Chico; reclusorio que se encuentra en la ciudad de Monterrey; en donde yo estudié, trabajé, me casé y supe, en aquella época, de casos de tragedias causadas por homicidios de distinta índole y cuyos actores, todos, iban a parar en la mencionada cárcel; y decidí comentar al respecto.-
El reciente motín en dicho reclusorio, ocurrido el 11 de Febrero del presente, cuando se enfrentaron, el bando comandado por Jorge Iván Hernández, capo del Cartel del Golfo y el bando de los “Zetas” que comandaba Pedro Salvador Zaldívar; el Z-27;dejó como saldo, dicen los medios, 49 muertos y muchos heridos y éste, no ha sido el único; el más sonado ocurrió el 24 de Marzo de 1980; entonces, los hampones Rodrigo Alcalá “El Huevo” y Carlos López, encabezaron un motín; secuestraron al Director del reclusorio, Capitán Alfonso Domene Flor y a unas oficinistas del penal.- Después de infructuosas pláticas entre los reos amotinados y las autoridades; el capitán fue ejecutado.- Éste penal y todos los demás, en el país, sufren una sobrepoblación que, al final de cuentas, genera junto con otras causas, un malestar, una ira reprimida; próxima a explotar a la menor oportunidad.- Si aceptamos que la corrupción impera en todo México; el sistema penitenciario mexicano exuda una fétida sanguaza que opaca todo lo vergonzoso que ensucia la política.- Los mal llamados Centros de Rehabilitación son el modus vivendi de celadores, alcaides y directores que explotan, humillan, martirizan y a veces asesinan a reos, que muchas veces ni siquiera han sido condenados; debido a lo lento de la impartición de la justicia mexicana; jamás, el subsidio entregado por el Gobierno Federal para las necesidades de los convictos, ha sido gastado totalmente en beneficio de los mismos, su comida da asco y repugnancia; deben comprar a precio de LIVERPOOL desde un cepillo de dientes hasta una colcha, en tiempo de frío y las vejaciones alcanzan a las mujeres, familiares de los convictos, que deben aguantar las agresiones de los celadores con tal de llevar lo necesario para hacer un poco más llevadera la reclusión; pero, por otro lado, los reos más peligrosos que tienen cuentas bancarias obesas, pueden comprar todas las comodidades que desean; siempre cuentan con buena comida y bebida, aparatos electrónicos, mujeres, droga y a veces hasta armas.- Automáticamente uno se pregunta ¿Porqué encierran en la misma prisión a bandas criminales poderosas? ¿Porqué en las revisiones periódicas; se encuentran, siempre, armas, alcohol y droga? ¿Porqué están vivos peligrosos criminales que han ingresado varias veces a los penales? y ¿Porqué hay inocentes purgando penas y criminales libres debido a que los señores jueces encontraron irregularidades en el “proceso”?
Quisiera poder; con voz engolada, como algunos pseudo intelectuales; sugerir alguna solución al problema, pero sé que debido a la baja escolaridad de los vigilantes y al alud de corrupción que empuja hasta el más honesto; considero más peligrosos a los guardianes que a muchos convictos y este problema continuará hasta que empiece el apocalipsis.-