Por William Hundelshauseen Carretero / Presidente Nacional APIC
En estos días de tensión, por lo que representó la elección del plebiscito cuyo objetivo principal era el de infundir aliento, dar esperanza y seguridad de que Dios nos acompaña en la consecución de esa esquiva PAZ por una Colombia mejor, por una civilización de amor, Gano el NO, y nos preguntamos qué va a pasar ahora que Colombia esta polarizada, entre los seguidores de dos grandes líderes como son URIBE y SANTOS, los unos están contentos porque al fin van a respirar tranquilos y se consolida con mayor fuerza el partido CENTRO DEMOCRATICO que en este proceso actuaron solos contra los partidos del gobierno incluyendo al POLO; mientras los otros están inconformes y se preguntan qué paso, si todos cumplieron, cuál sería el grupo de gobierno que fallo?, si todos recibieron la mermelada y aspiran que en los escrutinios las cosas cambien y le den a ganar al SI, porque caso contrario todo lo que se hizo, queda sin piso jurídico, no se aceptó el paquete total de acuerdos que se aprobaron en La Habana, Cuba, entre el gobierno de Colombia y las FARC tras casi cuatro años de negociaciones. La campaña por el NO estuvo liderada por el ex presidente Álvaro Uribe, tuvo una votación considerable, lo que significa que no se incorporaran los acuerdos de paz a la constitución o al ordenamiento jurídico del país. Con la ganada del NO ojala no se cumpla lo que manifestó El presidente Juan Manuel Santos advirtiendo el pasado mes de junio que si ganaba el ‘NO’ en el plebiscito, Colombia volverá a la guerra. “No, no se equivoquen. No es que vamos a volver a la mesa de negociación, volvemos a la guerra. Esa es la verdad”, dijo Santos a los Colombianos para que se volcaran por el SI; ojala Dios no permita que esas palabras se cumplan y hagan rema en un pueblo cansado de tanto derramamiento de sangre, con ese discurso y doble actitud. Quiso quedar bien con Dios y con Satanás. Olvidando que no se puede servir a dos señores; en cambio durante la campaña existieron verdaderos pastores de ovejas que iluminados por el espíritu santo le dijeron la verdad a su pueblo sin intereses politiqueros guiados por su doctrina y la palabra de Dios, llamados CRISTIANOS. Bastante se ha dicho y es necesario continuar diciéndolo: A los gobernantes injustos Dios les llama al arrepentimiento y al cambio de vida. Es necesario mantener “el dedo en la llaga” pues aun siendo así, los desmanes y descaros de impunidad, soberbia, desprecio a la vida se mantienen. Con lo que acaba de ocurrir en el plebiscito, debemos decir que es como un fuego que sentimos dentro, no podemos en nuestra realidad, dejar de decir: Alto a la impunidad y que estamos a favor de la paz producto de la justicia. Las “crisis” que enfrentamos hoy en COLOMBIA si bien no pueden aislarse de la realidad internacional, tienen en su base toda una historia de injusticias que no se ha reparado y que por el contrario se ha profundizado, los últimos gobiernos del país tienen una enorme responsabilidad en la situación actual, nunca colocaron como prioridad al Pueblo, ni lo hacen hoy, nunca apoyaron la agricultura, ni lo hacen hoy, nunca construyeron con el Pueblo estrategias que pudieran activarse ante escasez de alimentos, siempre se mantuvieron desarrollando el modelo consumista y copiando y haciendo parte de los males de otros gobiernos. Es insulto a la dignidad Colombiana que mientras muchos niños wayuu se mueren de hambre en la alta guajira, se continúen peleando el poder entre un bando y otro que no aportan en la construcción de una Colombia prospera y soberana, con igualdad y bienestar para todos. Quien promueve la Verdad, la defiende, y lucha porque la Verdad salga a la luz y él que es Justo no le abandonara en ese trabajo tan necesario en nuestra realidad. GANO EL NO! PERDIO SANTOS.