Teresita García … y ‘Las flores de agosto’

Por Azucena Caballero Herrera

Para Conape México

Escribo esta columna con mucha tristeza, reflexionando en lo efímero de la existencia humana y recordando a las personas importantes que han desaparecido de nuestra vida, sin que apenas nos hayamos dado cuenta o reparado fugazmente en ello.

Estimados lectores, quiero contarles de una escritora amiga que nos ha dejado recientemente. Me refiero a la profesora, escritora y declamadora, Teresa García Mancilla, cuya muerte nos ha causado profundo dolor en la Sech San Felipe y en Clepsidra Internacional. Estuvimos con ella en marzo del año 2011 en la Ciudad de Los Ríos, oportunidad en que recogimos sus sabias palabras en una entrevista que está siendo difundida en los medios internacionales como Conape México y Conape Chile / Prensamérica Internacional y TV Circuito Cerrado de México, así como también en las redes sociales. Ella fue fundadora del Centro Cultural ‘Francisco García Rival’ y de la Filial Valdivia de la Sociedad de Escritores de Chile, presidió esta última entidad durante siete años. Siendo una destacada gestora cultural, participo y organizó innumerables actividades como: talleres literarios para niños, adultos y adultos mayores; cultivó,  enseñó y difundió como nadie el arte de la declamación. La calidad de su trabajo literario y su incansable actividad artístico-cultural a favor de Valdivia y de la región, la hicieron merecedora al ‘Premio de Extensión Cultural de la Ciudad de Valdivia’; al ‘Premio de la Municipalidad de Máfil’ por su labor como poetisa y promotora cultural y al  reconocimiento de la ‘Unión de escritores americanos’ de la cual fue miembro.

Conoceremos su poesía a través de sus libros publicados ‘Voces mezcladas’ (1991) y ‘Raizal’ (1992) y en las ‘Antologías de prosistas y poetas valdivianos’. He titulado esta crónica con el nombre de uno de sus poemas de la tercera antología. ‘Las flores de agosto’

“Las flores de agosto/en el sur de mi patio/eran copihues blancos/que inundaban mi ser / Lo caminan, ligeras,/para ver a mi madre/besarte en pecho blanco/acunar su beber./Bebida de los sueños/de pezones pequeños/que mordí tantas veces/en lunas-soles de cada amanecer./Carlina, madre mía,/tan hermosa, tan bella;/llegué, toma mis manos,/te fuiste en el tren.”

Y este poema que lo encuentro notable, -tal vez premonitorio- se llama ‘Existencial’ “A través de la ventana/veo pasar la vida/tocando el arpa del amor./Me encuentro con el cáliz del ayer./Bebo en silencio/el néctar de las horas/la lluvia se mira en los vidrios para recordarme que afuera hay tantos inviernos./Cuelga en la ventana/el grito de la muerte.”

La poetisa, escribe de preferencia en verso breve, primordialmente compuesto de imágenes y metáforas que resulta un verdadero desafío para el lector, pero consideremos que ese es el estilo de la buena poesía.

Por último transcribo para Uds. ‘Detrás de la ventana’ “Veo el cordel del patio/con la ropa danzando/sin pensar en el mañana / Esas siluetas/con que juega el viento;/un poco son bandera/al aire herida/ flameando en sueños y esperanzas./Están de pie/los ojos vecinos/furiosos en la cerca./Entonces pienso que es mi vida/cual la ropa tendida/que pende sobre un hilo.”

Deseamos que la bien amada poetisa Teresa García Mancilla, haya emigrado a los planos celestiales en cuenta de la bienhechora misión que cumplió aquí en la tierra.