El Movimiento Político MIRA denunció hoy que se están presentando serias irregularidades en el cumplimiento del fallo de tutela del Consejo Superior de la Judicatura que le ordenó al Consejo Nacional Electoral y a la Registraduría Nacional del Estado Civil, realizar el recuento de los votos depositados por los Colombianos el pasado 9 de marzo en aproximadamente 13.800 mesas del territorio nacional.
No están interpretando bien la tutela.
En cerca de 13.800 mesas, la votación de MIRA presentó una diferencia superior al 10 % en sus listas a Cámara y Senado. Por eso el Movimiento radicó una tutela y esta ordenó que se realizara el recuento de los votos para verificar posibles anomalías denunciadas, como el hecho de que la mala calidad del plumón entregado por la Registraduría, llevó a que la persona que votaba por MIRA, al doblar el tarjetón manchaba la casilla del voto en blanco, ocasionando que muchos de estos sufragios fueron declarados como nulos.
“La tutela lo que busca es constatar si los votos que fueron depositados en esas mesas obedecen a los resultados que han informado las autoridades electorales, pero lo que al parecer se está haciendo es solo recontar los votos que los jurados habían clasificado como correspondientes a MIRA, sin revisar los demás que fueron depositados en la mesa; como los votos en blanco, los nulos y las tarjetas no marcadas”, afirmó el Presidente de MIRA, Senador Carlos Alberto Baena.
En algunos lugares, el proceso parece a escondidas.
Desde varias regiones del país nos han reportado que algunos funcionarios electorales no están permitiendo el ingreso de testigos que certifiquen la transparencia y efectividad del cumplimiento del fallo de tutela.
Este proceso no se puede realizar a puerta cerrada, “el que nada debe, nada teme”, el país necesita conocer los verdaderos resultados de las pasadas elecciones legislativas”.
Desde el Movimiento MIRA hacemos un llamado al Consejo Nacional Electoral y a la Registraduría para que se aclare y modifique la Resolución 2303 de 2.014 y se dé estricto cumplimiento al fallo, para evitar que se presente un desacato a la sentencia de tutela, que puede generar efectos disciplinarios, penales y fiscales.
“Si no se corrigen todas estas irregularidades, a partir del 20 de julio tendremos un Congreso a medias”.