- La Fiscal Especial para la Atención de Delitos cometidos contra la Libertad de Expresión se reunió con periodistas tabasqueños para reflexionar en torno a la problemática gremial
- Periodistas asesinados, fueron recordados durante el Foro-Opinión organizado por Alberto Torres Sosa, Vicepresidente CONAPE A.C.
Villa Hermosa, Tabasco.- Pese a la elevada cifra de asesinatos y agresiones a periodistas mexicanos, el gremio como tal no ha logrado reaccionar en consecuencia, ante a las trágicas circunstancias que ubican a México como uno de los países más peligrosos para ejercer actividades periodísticas; y pese a múltiples esfuerzos, trabajan diariamente enfrentándose a mayores riesgos; pese a ello, el gremio se encuentra diluido, sin fortalezas para lograr establecer mecanismos adecuados de protección, ni siquiera existe un censo para poder delinear estrategias y ubicar aquellos puntos donde se requiere atención urgente.
El panorama de amenaza y vulnerabilidad de los periodistas mexicanos se complica por el individualismo con que se conducen los trabajadores de los medios informativos y las organizaciones periodísticas, pues la falta de unidad y verdadera solidaridad complica establecer mecanismos efectivos para tener más garantías y seguridad en su labor informativa; este factor se pasa por alto al responsabilizar a las autoridades de no tener resultados en las pesquisas iniciadas ante las decenas de asesinatos contra mujeres y hombres dedicados a informar.
Estos fueron algunas de las consideraciones expresadas por los coautores del libro “tú y yo coincidimos en la noche terrible”, Marycarmen Aguilar Franco y Cornelio Merlín Cruz, quienes compartieron mesa y puntos de reflexión con Laura Angelina Borbolla Moreno, Fiscal Especial para la Atención de Delitos cometidos contra la Libertad de Expresión, quien comentó sobre la necesidad de crear mejores canales de comunicación entre el gremio, pues queda mucho por definir y entender de la tarea periodística y sus particularidades socio-demográficas, pues las características del trabajo periodístico mexicano son inmensamente diversas y por tanto requieren tratamiento diverso.
El periodismo es diferente en cada estado, dijo la Fiscal, a su vez, hay una gama también en cada región de las entidades en cuanto al quehacer informativo; no existe además una manera de establecer una definición concreta y valida en cuanto a quién es periodista, y sobre todo, indicó, no hay manera de conocer una cifra, al menos aproximada, de quiénes son y cuántos periodistas hay en México, este es un rubro donde se debe trabajar con especial atención.
Una organización refiere tener 30 mil agremiados en el país, y muchas otras agrupaciones revelan cifras de membrecía, mayores o menores, pero no hay parámetros para obtener el total, pues quienes se dedican al periodismo o trabajan en algún medio, no necesariamente están agremiados o enlistados en algún grupo.
Un censo seria de gran ayuda para determinar algunas acciones, pero es complicado realizarlo, pues hay estados donde la cantidad de medios informativos opaca cualquier intento, por ejemplo en el estado de Veracruz se calcula la existencia de 5 mil publicaciones periódicas; es también por ahora, la entidad donde se reportan el mayor número de agresiones y asesinatos; en este universo indeterminado, hay una fortaleza indudable, pero por desgracia la indiferencia permea prácticamente en todos los niveles, tornándose un núcleo muy débil, pues cuando se realiza alguna investigación los propios periodistas se niegan a colaborar bajo argumentos diversos, algunos muy validos, pero es curioso percibir de periodistas del extranjero, más interés y preocupación por cuanto ocurre con sus compañeros en México, que de los propios periodistas nacionales, cuya actuación y reacción es imprecisa y débil en la mayoría de los casos.
El asunto, pues, requiere de una reflexión constante, y un trabajo permanente de concientización, solidaridad y procesos de unificación a decir de Alberto Torres Sosa, Vicepresidente de CONAPE (Compañeros Nacionales de Periodistas y Editores A.C.), quien abrió una mesa más de reflexión durante el quinto día del Foro-Opinión sobre agrupaciones periodísticas en Tabasco, donde se enmarcó esta relatoría del libro, un compendio de textos dedicados a 127 periodistas y trabajadores de medios, asesinados o desaparecidos durante los dos anteriores sexenios, escritos por 127 periodistas de México y España, Colombia, Argentina, entre otros paises.
En su oportunidad Cornelio Merlín, periodistas oaxaqueño, resaltó la visión humana del periodista y sobre todo su fragilidad, además enalteció el alto sentido social con el cual los compañeros asesinados realizaban su labor; él mismo ha experimentado la fuerza implacable y asesina de quienes ostentan el poder y se incomodan con la prensa crítica, el resultado, haber sido él víctima de cinco atentados; es un sobreviviente del sistema político, pues las indagatorias revelan que el mayor número de agresiones son ordenadas por quienes ostentan y detentan poder público; desde esta óptica participó en el proyecto de “Nuestra Aparente Rendición”.
Por su parte Marycarmen Aguilar, del estado de México, lamentó esta actitud de indolencia generalizada entre la mayoría de compañeros, a quienes les pidió cerrar la mente y abrir el corazón ante esta amenaza constante sobre los periodistas y la sociedad, donde más peligroso que la muerte misma ocasionada por un balazo, esta la muerte emocional y física de cientos de periodistas mexicanos; esta problemática multifactorial es urgente de atender pues atrapa poco a poco a quienes se dedican al periodismo y los aniquila también lentamente en largas agonías, pues por principio de cuentas, la mayoría ni siquiera gozan de las mínimas garantías laborales, no tienen seguridad social y al final de sus vidas padecen la indiferencia empresarial, institucional y el desdén de sus propios compañeros.
El libro, se ha considerado como el único homenaje dedicado a los periodistas asesinados en México, entre el 2 de Julio del 2000 al 2 de Julio de 2012; la edición se realizó gracias a un esfuerzo colectivo, por iniciativa del colectivo “Nuestra Aparente Rendición”; en el proyecto faltan aún muchos nombres, pero es un primer esfuerzo, indicó el periodista Merlín Cruz, quien calificó la publicación como una “semilla de esperanza para lograr la paz y la justicia en este México que sigue siendo el país más peligroso para ejercer el periodismo”.